Mi primera estancia en el Parque Natural de las Torres del Paine, me hizo pasar por la Laguna Azul, un maravilloso lago de color azulado con Las Tres Torres al fondo, que nos mostraban una composición fotográfica irresistible.
Montamos las tiendas detrás
de unos árboles que nos protegían del fuerte viento y después de comer hablamos
con los guardas forestales, que nos mostraron diferentes caminos a 45' con
miradores a las Torres. También preguntamos por el Puma, un animal que suele
salir a atardecer y al anochecer, y al que se ha sido visto en alguna ocasión
por la Laguna. Aunque no es esta la zona más idónea para encontrártelo, si que
más adelante nos mostraran su zona de mayor estancia y al que sin duda se
pueden tener más opciones de fotografiar.
Torres del Paine
El día empezó muy nublado,
lo que nos hizo aprovechar para buscar ubicaciones en diferentes zonas del
lago, sin encontrar un resultado de color al atardecer al encontrarse las Tres
Torres rodeadas de gran nebulosidad que impedían la entrada de luz del sol.
Por la mañana del día
siguiente, optamos por cambiar de zona y realizar el amanecer en una
localización próxima que Alejandro Blanco ya nos mostró en el
camino a la Laguna, donde las vistas del macizo con sus Tres Torres a la
derecha, nos sorprendió con una luz fantástica de cálidos colores.
Saliendo de nuestro primer
amanecer, y después de fotografiar una manada de Guanacos durante más de una
hora y a distancias muy cercanas, volvimos a la Laguna Azul, donde pudimos
aprovechar aun la tenue y bonita luz que el día todavía contemplaba, realizando
tomas de Las Tres Torres al fondo, con la Laguna Azul a nuestros pies
reflejando el Macizo del Paine en sus aguas, una fantástica imagen guardada
para nuestro recuerdo.
La Laguna Azul
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