martes, septiembre 08, 2015

SKÓGAFOSS


Es la cascada del río Skogá. A poco menos de 5km de la costa sur de Islandia, nos encontramos con esta majestuosa e imponente cascada de 60m de altura y 25m de anchura, considerada como una de las mas bellas de la isla. 

Cascada Skógafoss

Una de sus características principales, es el arco-iris casi permanente que se forma en su base, y que se produce gracias a la cantidad de espuma que se rompe al chocar sus aguas con el suelo formando pequeñas gotitas de vapor de agua que dispersas en el aire y en días soleados forman este arco de color, aveces incluso doble, creando un precioso espectáculo natural.

Cascada Skógafoss con Arcoíris

La cascada es completamente accesible en su base, y en ella podemos escuchar el estruendoso ruido que provoca la gran cantidad de agua que cae y se rompe en un suelo formado por una piedra de color oscuro, típica de una zona volcánica, que contrasta fuertemente con el verde de la corta vegetación que crece en todo su alrededor.

En uno de sus laterales podemos encontrar un sendero que sube a la parte superior de la cascada y desde donde podemos observar la linea de costa. En este punto parte un trekking de unos 23km que nos conduce hasta Thormork o bosque de Thor, rodeando el río Skoga, y en el que observarse hasta una veintena mas de cascadas. Este sendero sigue hasta llevarte hasta Fimmvördouháls, una zona que divide los glaciares fáciles de pronunciar Eyjafjallajökul y Myrdalsjökull, unos gigantescos recipientes de hielo por donde pasa este rió y que si continuamos llegamos hasta Landmannalaugar, la famosa zona en la que encontramos uno de los trekkings mas bonitos del planeta.

Skógafoss desde el camino


Sobre la cascada Skogafoss existe una leyenda que explica que el primer vikingo que se estableció en la zona, llamado Prasi Pórólfsson, escondió un tesoro en una caverna situada justo detrás de la cascada y que hasta ahora solo un joven fue capaz de ver y tras intentar cogerlo se desvaneció pudiendo quedarse solamente con un anillo que se encontraba justo a su lado. Este anillo se colocó en la misma puerta de la iglesia de Skógar y hoy en día es el orgullo del museo local.